viernes, 27 de septiembre de 2013

REFLEXIONANDO EN MEDIO DE TANTAS SITUACIONES, ES TIEMPO DE CRECERNOS...
  Luego de un proceso de restablecimiento y de un merecido descanso; de vuelta a las labores que nos han sido confiadas es bueno seguir agradeciendo a Dios por el don de nuestra existencia, si bien es cierto que el descanso nos permite hacer un alto y relajarnos de los muchos compromisos también es cierto que en la convulsión de la dura realidad del venezolano cada día; debemos levantarnos optimistas de querer lograr el bienestar de los que nos rodean y el propio; Jesús mismo en sus momentos de angustia y desolación jamás se olvidó de clamar al Padre.Hoy es tiempo de tener en claro que la dura realidad cada día nos golpea a todos, sin distingo de credos; quizás habrán personas que no necesitan nada, pero que triste ver que un padre, madre o representante no envía a su niño(a) al colegio porque este carece de lo necesario para asistir a su aula de clase; de igual  forma es el mismo padecimiento de quienes recibiendo el pago de su trabajo vemos como la inflación consume lo que con tanto esfuerzo se logra. Es tiempo de crecernos de aceptar pero no resignarse, de vivir sin olvidar que el futuro es incierto sobre todo para quienes sin haber batallado en la vida ya son responsables de situaciones que ellos mismos desconocen.
  Nuestra historia sigue su curso, pero es un momento tan transcendental, el horizonte promisorio se oscurece con el alto costo de la vida, con la violencia, con los muchos hombres y mujeres, niños-jóvenes que pierden sus vidas día a día en manos del hampa, la mala alimentación, la poca asistencia médica de la población, pero el venezolano(a) hecha para adelante y resuelve ¿Pero cómo crecernos en medio de tantas injusticias, de tantas calamidades, deudas, afanes? Dios que nos ha creado de la nada siempre nos expresa su amor y encontramos manos generosas, hombros que nos levantan, familiares, amigos, parientes que motivan y son ejemplo de lucha, constancia y superación; BENDITO  SEA DIOS QUE EN MEDIO DE TANTAS VICISITUDES SOMOS CAPACES DE SONREÍR, DE DETENERNOS Y AGRADECER A DIOS TODO CUANTO OCURRE EN NUESTRA VIDA.
 Quizás la realidad que hoy describo no sea la misma para todos; pero tan cierto es que la consigna sigue siendo"ES TIEMPO DE CRECER EN MEDIO DE LA VIVENCIA DIARIA", es tiempo de aferrarnos a nuestros principios, nuestras convicciones y empujar la vaquita, de pasar a la acción y revestirnos de un traje nuevo que nos haga alcanzar nuestros ideales, los sueños anhelados y poner a disposición todo aquello que contribuya a la vivencia de una fraternidad sana, amena, agradable para todos...Muchos que ven la vida al estilo laight deben procurar asumir con convicción lo que escogieron como profesión, muchos de los que tapan la realidad con paños tibios deben tener presente que no hay verdad que se oculte y todos tenemos algo de verdad en nuestras manos, que lo que más amamos debemos protegerlo, engrandecerlo y cuidarlo como un tesoro escondido en una vasija de arcilla, para cada día asumir los retos con disposición y con la certeza de que todos somos responsables de la calidad, del bienestar y sea Dios mismo quien firme nuestras buenas acciones.
 Es tiempo de cambiar y el cambio comienza por uno mismo, que los retos que nos plantea el contexto en el que vivimos sea una oportunidad para transformar esa realidad, con la constancia y el apego a Nuestro Señor Jesucristo; revisando constantemente nuestro caminar, acciones, obras y gentileza del corazón.